William Fernando Torres fue mi profesor cuando yo estudiaba Lingüística y Literatura en la Universidad Surcolombiana. Una época magnífica llena de despertares, proyectos, canciones, vinos, viajes... Bajo su influencia, quienes tuvimos la suerte de ser sus alumnas y alumnos, recorrimos caminos más allá de las cuatro paredes del aula. Nos adentramos en los intersticios de la creación y la vida. ¡Todo a la vez!
Con él navegamos por las aguas de la poesía, la música, el teatro, el quehacer pedagógico con el placer de la palabra y la acción y el gusto por explorar nuevos senderos.
Pero WF además de ser profesor, investigador, trabajador cultural incansable, narrador de altos vuelos también es un poeta consumado. Uno de esos cantores sutiles y profundos que hacen de la palabra un arte de depuración y sensibilidad.
Hace algunos días me envió algunas de sus creaciones; hoy quiero compartirlas con todas las personas que leen esta bitáco...