#nolesvotes #democraciarealya #spanishrevolution Ya era hora de que hubiese este estallido social, esta efervescencia humana que se toma la plaza, la calle, el barrio. Era hora de salir con nuestras voces, con nuestras rabias y nuestras desesperanzas. Ya era hora de acabar con la inercia de una sociedad dormida bajo el manto falaz de un Estado de bienestar que adormila las conciencias. Hacía tiempo que no me sentía tan feliz como anoche en la plaza Catalunya. Feliz y esperanzada, acompañada por miles de hombres y mujeres, gente golpeada por una crisis generada por la perversidad de un sistema económico montado sobre la desigualdad, la injusticia, la ignominia. Y anoche volví a mi época de estudiante universitaria cuando todo lo miraba en el espejo de la Revolución y la utopía y me vi asaltada por una corriente abrumadora de esperanza. ¡Cuánta vida en las manos, en los gritos, en las canciones, en los rostros, en las miradas, en la música prístina de la protesta y la lucha! No se