Primeras impresiones sobre Agua clara en el Alto Amazonas
Las coincidencias son mágicas intersecciones de espacio tiempo acción. Eventos que se presentan sin buscarlos y que en algún momento se cruzan, se convierten en uno. Y eso es exactamente lo que me pasó con Agua clara en el alto Amazonas (finalista en el premio de novela Ciudad de Barbastro 2009), original que muy amablemente me envío el escritor Marco Tulio Aguilera Garramuño . Acabé de leerlo el sábado pasado después de viajar por sus páginas a un espacio que no me es del todo desconocido. Los ríos, los colores, los sonidos y aromas de la selva los llevo dentro de mí porque durante un tiempo, cuando era muy pequeñina, viví en la manigua (mi abuelo y mi padre colonizaron las selvas caqueteñas en la década de los 60 y 70, respectivamente). Pues bien. Decía que acababa de leerlo y aún estaba varada en algunas de esas descripciones cuando hablé con mi hermana que vive en Bogotá y me dijo que acaba de llegar del Amazonas en donde había pasado unos días maravillosos. Entonces me habló de l