Huila, entre la inercia y la promisión
Reproduzco a continuación un artículo del periodista Melquisedec Torres Ortíz (quien además es mi cuñado) en donde hace una reflexión sobre el devenir de la región en que pasé parte de mi infancia y juventud y que siempre llevo en la memoria: el Departamento del Huila. Y allí está Neiva. Junto al río, la ceiba y los guaduales se siente el aliento de la canícula como en ninguna otra parte. Tierra de historias bravías, de montañas y desiertos; de atardeceres incendiados; de aguas que bajan de la montaña y hieren el país. Lugar de los recuerdos. Huila, entre la inercia y la promisión Melquisedec Torres Bogotá D.C., julio de 2009 Un hecho histórico dentro de la aviación colombiana dejó en evidencia el atraso del Huila frente al país: en 1920 un hidroavión de la aerolínea colombo-alemana SCADTA cubrió centenares de kilómetros entre el puerto de Barranquilla, sobre el Atlántico, hasta Neiva, capital del Huila; acuatizó sobre el río Magdalena frente a unos sorprendidos habitantes que no conoc