Un poema de Machado
Ana , una estupenda y sensible mujer asturiana, me envía este bello poema de Antonio Machado, su poeta favorito. Poeta que conocí en mi época de estudiante universitaria de literatura y que desde entonces llevo conmigo. La sencillez y hondura de sus versos, alejados de artificios, conmueven justamente porque tocan lo esencial. Allí se conjuga el tiempo, la vida, la muerte, la existencia cotidiana, el paisaje, la esperanza... ......... A un olmo seco Al olmo viejo, hendido por el rayo y en su mitad podrido, con las lluvias de abril y el sol de mayo algunas hojas verdes le han salido. ¡El olmo centenario en la colina que lame el Duero! Un musgo amarillento le mancha la corteza blanquecina al tronco carcomido y polvoriento. No será, cual los álamos cantores que guardan el camino y la ribera, habitado de pardos ruiseñores. Ejército de hormigas en hilera va trepando por él, y en sus entrañas urden sus telas grises las arañas. Antes que te derribe, olmo del Duero, con su hacha el leñador, y